La UNQ se suma a la preocupación de sistema universitario por la detención de estudiantes de tres Universidades Nacionales.
La Universidad Nacional de las Quilmes repudia los actos de represión ocurridos en las inmediaciones del Congreso mientras el Senado daba tratamiento a la denominada Ley Bases. A su vez se suma a la preocupación de las Universidades Nacionales por la detención de estudiantes de la Universidad Nacional Arturo Jauretche (UNAJ), la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), y la Universidad Nacional de Hurlingham (UNAHur) y por las otras 30 personas detenidas el miércoles.
La libertad de expresión y el derecho a la protesta son pilares fundamentales de la democracia, y deben ser protegidos y garantizados. La represión de manifestaciones pacíficas, contra ciudadanos que ejercen su derecho a expresarse, así como el uso desproporcionado de la fuerza por parte del Estado, son acciones que deben ser condenadas de manera contundente.
Cada detención arbitraria y cada acto de intimidación es un atentado contra la dignidad humana y los principios democráticos. Tenemos aún mucho camino por recorrer en materia de construcción de una sociedad más justa y equitativa. Reafirmamos nuestro compromiso con la paz social, el camino del diálogo, y el respeto y conocimiento mutuo. La represión no debe ser la respuesta a la disidencia; la escucha y la participación son las únicas vías legítimas para resolver los conflictos y avanzar como nación.
La UNQ adhiere además a la extrema preocupación de la Red Interuniversitaria de Derechos Humanos (RIDDHH) del CIN por los acontecimientos de violencia sucedidos, y abogamos por que los tres poderes garanticen las condiciones básicas de tolerancia y de libre expresión y la posibilidad de manifestación que exige la convivencia democrática.