Sección de Opinión. Por Mario Lozano, Rector de la UNQ. La propuesta final de separación de activos y accionistas presentada la semana pasada por el Grupo Clarín, brinda una fuerte señal de doble partida. No sólo indica que se continúa con la ejecución del plan de adecuación que fuera aprobado en febrero de este año por la Afsca, sino además y lo que es más importante, los últimos acontecimientos demuestran que la senda trazada con la ley de SCA en octubre de 2009 y consolidada mediante la validación de la misma por la Corte Suprema de Justicia en octubre de 2013, se encuentra firme y con el vivo espíritu de sus orígenes.